LOS MILITARES QUE HE CONOCIDO

Publicado el: 12 Mayo 2023

LOS MILITARES QUE HE CONOCIDO

Oscar Conde Ortiz, Socio Fundador
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Durante 37 años de ejercicio profesional como abogado litigante (Conde Abogados) he conocido a decenas de miembros de la Fuerza Pública que buscan asesoría jurídica las más de las veces porque han resultado heridos en actividades del servicio (operativos militares), lesionados en entrenamiento, desplazamientos operacionales, o por fuera del servicio, que han sido retirados por la causal denominada "pérdida de la capacidad sicofísica" que es suficiente para ser despedidos de manera intempestiva.

 

Sin requisitos para lograr la pensión de invalidez (no tienen una disminución laboral que sobrepase el 50%) o sin suficiente tiempo para acceder a una pensión de jubilación, quedan a la intemperie, sin competencias laborales, sin ser preparados para "reintegrarse a la sociedad", reflejan el drama personal y de sus familias ante un futuro incierto  sin percibir los ingresos laborales, los beneficios salariales y asistenciales y, lo más preocupante,   sin  los servicios médicos y hospitalarios para continuar los tratamientos que se necesitan para estabilizar o mejorar su estado de salud.

 

También hay situaciones puntuales pero igual de dramáticas: familias con hijos que en la prestación del servicio militar obligatorio (soldados regulares) y de  soldados profesionales se convierten en drogadictos, jóvenes militares a quienes se les ha diagnosticado ser portadores de VIH u otras enfermedades adquiridas en la comunidad militar como tuberculosis, o que se les desarrollan enfermedades mentales, que se convierten en "un problema" para los comandantes militares; y aquí viene la primera conclusión: no existe una política institucional preparada para "lidiar" con estos jovenes  que presentan estas situaciones que afectan su salud.

 

Además, están los militares golpeados por sus superiores, asesinados por sus propios pares, a quienes no se les da permiso para visitar a sus padres en grave estado de salud, etc., etc..

 

La vida militar a veces no es tan épica o heroica como la presenta la propaganda institucional.

 

Arropada por una importante jurisprudencia que se ha desarrollado para proteger a estos jóvenes y por  jueces y magistrados que comprenden que se deben tomar decisiones desde la perspectiva de la solidaridad, el respeto de derechos laborales, en especial la estabilidad laboral, y que la actividad castrense  no solo es física, Conde Abogados ha logrado reintegrar a casi todos ellos. A veces digo que hemos reincorporado tantos militares que serían suficientes para conformar un batallón.

 

Todos estos hechos han ocurrido y ocurren en ese inmenso teatro de operaciones insurgentes y contrainsurgentes en que se ha convertido nuestro departamento.

 

También he compartido con militares de alto rango, sobre todo ahora, que el Pacto Histórico es gobierno, y debo decir que no todos los militares  tanto activos como de la reserva piensan como el General (R) John Agudelo; existe una gran mayoría, sin desconocer las voces disidentes, de  oficiales, suboficiales y soldados que manifiestan el respeto a las instituciones y sin ningún reparo reconocen al Presidente de la República como legítimo Comandante de las Fuerzas Militares. 

 

Se está dando un gran debate sobre la formación y la instrucción de nuestros militares en el respeto de los Derechos Humanos, las relaciones que se deben tener con la sociedad civil, el trato con quienes protestan y el reconocimiento  de sectores sociales y políticos como legítimos actores institucionales  a quienes se les consideró por años, por no decir décadas,  como "enemigo interno" y que ahora gobiernan el país.

 

En la manifestación del pasado 10 de mayo más que una concentración de la reserva de las FFMM fue un acto político donde se pavonearon dirigentes de la derecha colombiana quienes siempre han considerado que militares y policías son sus aliados políticos naturales y que se creen  legitimados para derrocar el gobierno de Gustavo Petro, pero otra cosa están pensando al interior de la Fuerza Pública y las colombianas  y los colombianos que estamos pendientes de defender y respaldar la institucionalidad.   

 

Este Gobierno está realizando ingentes esfuerzos para resolver el grave problema de disfuncionalidad laboral, prestacional y asistencial que golpea a militares y policías (solo un ejemplo, la mesada pensional 14 fue eliminada no solo para los trabajadores sino también para los integrantes de la Fuerza Pública, adivinen ¿por quien ?), la estabilidad laboral de militares y policías activos y heridos, una nueva forma de ascensos en la carrera militar y policial, etc..

 

Este clima, que a veces parece crispar, se da cuando Salvatore Mancuso está contando el desarrollo y ejecución de la operación paramilitar nacional con la colaboración y coadyuvancia de mandos militares y policiales, políticos y empresarios del sector público y privado, con todo el drama que significó la implicación de  gravísimas violaciones de derechos humanos.